El propósito fundamental de la conectividad M2M (Machine-to-Machine) es facilitar la transferencia de datos entre dispositivos, tal como su nombre indica, de manera remota, automática y sin necesidad de intervención humana directa. Esta conexión se establece mediante el uso de la red móvil.
La conectividad M2M tiene como objetivo principal mejorar y agilizar los procesos de recolección y transmisión de datos entre máquinas, lo que resulta fundamental para la toma de decisiones informadas. Al ser una parte integral del ecosistema del Internet de las cosas (IoT), permite la optimización de la comunicación entre dispositivos, contribuyendo así a la eficiencia operativa y a la mejora de diversos procesos industriales y de gestión.